En 1998, un grupo de
personas que trabajamos en el Gobierno Vasco y Osakidetza nos
planteamos expresar nuestra solidaridad con las situaciones de pobreza
y marginación existentes a nuestro alrededor y, con especial
dramatismo, en los países más pobres del mundo. Para ello, aprovechando
nuestro medio de trabajo como ámbito de participación y expresión de
solidaridad con los más desfavorecidos, decidimos adherirnos a la reinvindicación generalizada del 0,7 %, creando
un Fondo de Solidaridad. Así, por coherencia personal con la
reivindicación, los trabajadores y trabajadoras que nos adherimos a la
iniciativa, dedicamos el 0,7 % de nuestra nómina a la financiación de
proyectos de cooperación.
Los objetivos que nos
marcamos son básicamente dos:
- Fomentar la
solidaridad del colectivo de trabajadores del Gobierno Vasco y
Osakidetza con las situaciones de marginación y pobreza, a través de
campañas de sensibilización.
- Recoger fondos para
financiar programas de desarrollo.